cartelera familiar: 27.- Celebridades: BESSIE COLEMAN

BESSIE COLEMAN

En este breve relato, no pretendo otra cosa que dar a conocer la historia de una mujer extraordinaria, que a pesar de ser afroamericana con todo lo que eso significaba, logró hacer realidad su sueño, ser la primera mujer de color que obtuvo la licencia de piloto internacional y la primera en volar en avión.

Su historia comienza en el estado de Texas en el año 1893, su mundo era rural y profundo, fue la penúltima de una familia de trece hermano/as, en la que su madre llegó a sufrir la esclavitud en sus propias carnes, apenas tuvo uso de razón comprendió que había muchas cosas que no estaban al alcance de los de su raza, entre ellas desgraciadamente la educación y demás la sociedad norteamericana estaba regida por una leyes de segregación muy estrictas que limitaban sus posibilidades.

Su vida, es una historia llena de coraje, empeño, fuerza de voluntad y fé, fé en la consecución de sus objetivos a pesar de todos los inconvenientes que iba a encontrar en su camino. Fue una persona autodidacta, ella sola aprendió a leer y escribir, aunque posteriormente asistió a una escuela segregada, trabajó en una peluquería para gentes de color, ahorró dinero y aprovechaba cualquier oportunidad para estudiar y prepararse para lograr su objetivo, volar, el mundo de la aviación era su culmen.

Al regreso de sus hermanos mayores de la I G.M. en Europa y comentarles que en Francia había escuelas de aviación y que asistían tanto hombres como mujeres fueran de color, chinas, francesas o de cualquier punto del planeta, que la única condición era la valía personal y poder asumir el coste económico, Bessie vio el cielo abierto y sin dudarlo emprendió viaje hasta Francia.

Un vez en Paris y contando con los dólares suficientes que pidió a sus familiares y amigos, además de sus ahorros, se apuntó en la Ecóle d,Aviatión des Fréres Caudrón, allí pudo comprobar que todo no son sonrisas, que el volar también entraña riesgos, comprobó personalmente los peligros de la aviación, pero con su dedicación y empeño superó todas las pruebas a las que se vio sometida, era un dicho muy común en la Escuela que había dos formas de salir “licenciada o estrellada” ella apostó por lo primero y en 1921 Coleman, la única mujer en su curso de aviación, recibió su licencia de piloto, siendo la primera mujer negra en el mundo que lo consiguió.

Regresó a estados Unidos dispuesta a que su historia fuese un espejo en el que se miraran muchas mujeres afroamericanas, ya que para lograrlo amen de ciertas condiciones lo imprescindible era coraje, determinación y mucha dedicación al objetivo propuesto. Su historia apareció en las primeras páginas de los principales periódicos, tuvo que luchar mucho, se introdujo en un mundo muy masculino en el que tuvo que superar dos handicaps, ser mujer y afroamericana, pero eso no fue obstáculo. Fundó su propia escuela de aviación para gente de color.

En la primavera de 1925 fue entrevistada por el diario Houseton Post Dispatch y expresó con toda claridad : "La raza negra es la única raza sin aviadores y yo quiero interesar a la gente negra en volar, y por tanto, ayudar de la mejor forma que conozco a mejorar la situación de la gente negra". También comentó: He decidido que la gente negra no debe sufrir las dificultades que yo he sufrido, por eso me decidí a abrir una escuela de aviación y enseñar a otras mujeres negras a volar. Necesitaba dinero para ello y por tanto comencé a dar exhibiciones de vuelo y a dar conferencias acerca de la aviación. El color de mi piel, que al principio era un gran problema, ahora atrae a grandes masas de gente por dondequiera que voy.

Como su coetánea Amelia Earhart, Coleman quería que más mujeres se convirtieran en pilotos. También como Earhart, dió conferencias donde hablaba a mujeres y niños pero su trayectoria se vio truncada, cuando apenas contaba con 33 años de edad, mientras probada un nuevo aparato que había adquirido para su escuela cayó en picado y falleció al instante, esto ocurrió en Jackksonville en el año 1926.